El Black Friday ya no es solo una jornada de descuentos, sino que también se ha transformado en un verdadero termómetro de las ventas online para los chilenos. Con ventas que ya superaron los 550 millones de dólares durante la jornada del año pasado, el evento ha consolidado su lugar como el hito comercial más importante del año, superando al Cyber Monday y marcando el inicio de la temporada navideña.
De cara a la versión que tendrá lugar este 28 de noviembre, el panorama ha cambiado notoriamente. El cobro del 19% de IVA en compras internacionales en aplicaciones como Temu o Shien, el que comenzó a ser aplicado en octubre, va a reducir la competitividad de estas plataformas.
Esto significa que gran parte del gasto, que antes iba a estas tiendas, podría irse al comercio local, lo que sería beneficioso para los retailers que participen en el viernes de descuentos masivos organizado por la Cámara de Comercio de Santiago (CCS).
Compras más informadas y estratégicas
Según el informe, el 75% planifica sus compras con semanas o incluso meses de anticipación, lo que indica que el consumidor chileno ha madurado y ha tomado más acciones.
La impulsividad ha sido reemplazada por una búsqueda más racional, es decir que, comparar precios, revisar reseñas y aprovechar las cuotas sin interés se han vuelto prácticas comunes entre los compradores más jóvenes. Además, la calidad del producto, más que el precio, se posiciona como el principal factor de decisión para el 32% de los consumidores.
Esta nueva mentalidad se traduce en un enfoque más estratégico. Las generaciones Millennials y Z, osea, los motores del consumo digital, lideran las compras online, priorizando la tecnología, viajes y artículos duraderos. Esto no solo se trata de aprovechar rebajas, sino de la inversión en calidad y experiencias.
Las categorías más buscadas
Durante el Black Friday del año pasado, los bienes durables fueron los grandes protagonistas, con un crecimiento del 53% en ventas. Por su parte, los celulares encabezaron la lista de los productos más vendidos, seguidos por los televisores, los notebooks y las consolas. También destacaron las categorías de turismo y servicios, que experimentaron un alza de más del 60% gracias a la coincidencia del evento con el inicio de la temporada de vacaciones
Para este año se espera que la tendencia se mantenga, con un fuerte impulso en productos de tecnología y viajes, pero también se espera un crecimiento sostenido en supermercados y bienes de primera necesidad.
Cada vez más chilenos aprovechan el Black Friday para hacer compras planificadas de abastecimiento, especialmente en un contexto económico donde el ahorro ha empezado a tener más protagonismo.
Diferentes medios de pago y confianza digital
Uno de los cambios más significativos es el aumento de los medios de pago digitales. Las billeteras electrónicas, como Tenpo o Mercado Pago, se están consolidando como las preferidas por su rapidez y seguridad. Además, el 88% de los consumidores valora mucho la posibilidad de poder pagar en cuotas sin interés, lo que convierte a esta opción en una herramienta clave para impulsar las ventas online.
Sin embargo, la confianza sigue siendo un punto crítico para estas fechas. Por eso, la CCS ha fortalecido su plataforma Confianza Digital, la cual certifica a las tiendas adheridas al evento y garantiza que las ofertas sean reales y seguras.
Un evento más consciente
A diferencia de versiones anteriores, los chilenos llegan a este con una visión más prudente. La actualidad económica y la búsqueda de estabilidad financiera logra que los gastos sean más selectivos y sensatos. Comprar bien, significa hacerlo informado, de forma estratégica y con alternativas, llevando a priorizar un gasto que aporte valor.
Esta nueva edición del Black Friday promete ser más que una fecha de descuentos, va a ser una radiografía del nuevo comportamiento del consumidor chileno, el cual está marcado por la planificación, la responsabilidad y la preferencia por el comercio local.