Una auditoría reveló que el Museo del Louvre de París operaba sus sistemas de videovigilancia con contraseñas tan simples como “LOUVRE” o “THALES”, además de software obsoleto como Windows 2000 y XP, pese a advertencias previas. Esto salió a la luz luego del robo de nueve joyas imperiales en octubre de 2025, lo que puso bajo el foco las fallas en la protección tecnológica de uno de los museos más emblemáticos del mundo.
El informe señala que durante más de veinte años se subestimó el riesgo estructural para la seguridad del museo. Los expertos indican que la red de vigilancia estaba expuesta, ya que ese sistema permitía modificaciones de credenciales y acceso remoto no autorizado. Ahora, las autoridades francesas evalúan una “actualización urgente” de todos los protocolos de seguridad del museo.