Olvida por un momento el dicho de “el que madruga, Dios lo ayuda”. Expertos advierten que levantarse a las 4 o 5 AM para “aprovechar el día” altera el ritmo circadiano, ese reloj biológico que regula hormonas, temperatura y descanso. Forzar al cuerpo a madrugar puede causar fatiga crónica, desequilibrios metabólicos y riesgo cardiovascular. Incluso, trabajar de noche y exponerse a luz artificial prolongada está considerado potencialmente carcinogénico por alterar la melatonina.
La receta de los especialistas es simple: respetar tus ciclos naturales. Mantén horarios constantes, evita pantallas antes de dormir y crea un ambiente oscuro y silencioso. No todos nacimos para ser mente de tiburón a veces, dormir bien también es aprovechar el día…
