La Lifetimes Tour de Katy Perry ya compite por ser “la gira más accidentada del año”. En Carolina del Norte, la cantante se estremeció repentinamente mientras era elevada en una estructura aérea iluminada con luces LED. Los fans sospechan que fue una descarga eléctrica. Aun así, Perry siguió el show como si nada hubiera pasado.
Y no ha sido el único susto. En San Francisco falló la mariposa gigante que la transportaba durante Roar. En otro show, una fan invitada al escenario se desmayó de la emoción y la propia Perry terminó ofreciéndole agua y hasta una oración. A eso se suman rodillas magulladas, fallas mecánicas y un fan que logró abrazarla en medio de Hot N Cold. ¡A cuidarse Katy!
