En Chile, los secuestros alcanzaron en 2024 su cifra más alta de la última década: 868 casos, un aumento del 2,1 % respecto a 2023 (850), y un claro “punto de inflexión” desde 2022, cuando los rapto pasaron de 492 a 826, consolidándose por encima de los 800 anuales desde entonces. Además, el 37,8 % de estos delitos está vinculado al crimen organizado, una proporción que sigue escalando
Durante el primer semestre de 2025 ya se observa una disminución del 29 % en los ingresos reportados, aunque las autoridades siguen considerando el fenómeno como una amenaza estructural.
