Un informe publicado en España reveló una cifra alarmante: las hospitalizaciones de adolescentes por depresión aumentaron un 1.217% en las últimas dos décadas, pasando de 142 ingresos en 2001 a casi 1.800 en 2021. La edad media de los pacientes es de 16 años, y el 75% de los casos corresponde a mujeres. El año 2021 marcó un récord, con más de 200 ingresos por cada 10.000 hospitalizaciones, reflejando una tendencia que ya no puede pasar desapercibida.
El estudio apunta a múltiples factores que se han combinado para detonar esta crisis: el uso intensivo de redes sociales, la incertidumbre social y económica tras la crisis del 2008, la presión por rendir y encajar, y la pandemia como catalizador emocional. No se trata solo de estadísticas: hablamos de jóvenes que colapsan emocionalmente antes de llegar a la adultez.
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