“Tienes que reconocer que tú eres un 7 para la cama, nadie te hace el peso, eso te lo he dicho subrayado. Ahora, si se da la oportunidad, me voy a comer a otra”. Con estas palaras el sacerdote Gustavo Adolfo Morales, párroco de la iglesia Santa Rosa de Lima en Los Andes, Región de Valparaíso, se comunicaba por audio con su denunciante, que lo acusa de haber mantenido durante al menos cuatro años una relación sexual con ella, en medio de un contexto de abuso de conciencia y manipulación emocional. La denunciante presentó audios en los que el cura planificaba encuentros, mencionaba precauciones para evitar ser descubiertos y elogiaba su desempeño sexual, incluso afirmando que intentaría involucrarse con otras mujeres
Tras la denuncia, el sacerdote envió mensajes de respuesta a la mujer, en los que la calificó de “imaginativa” y “desequilibrada”, e indicó: “Siempre pensé que eras más sensata y que no te pasarías rollos”. Morales reconoció haber tenido una relación íntima, aunque negó haber cometido abuso, defendiendo que es “un pecador, no un delincuente”, y confirmó que continúa en sus funciones pastorales y en la formación de diáconos, pese a la investigación en curso…
