El caso de Adriana Smith, una mujer que permaneció con muerte cerebral durante cuatro meses en Georgia, Estados Unidos, ha generado controversia debido a la legislación estatal que prohíbe la desconexión de soporte vital en embarazos con actividad fetal. Smith dio a luz a su hijo, llamado Chance, quien pesa 1 kilogramo y se encuentra en una incubadora en Atlanta. La madre de Adriana, April Newkirk, informó que su hija será desconectada en los próximos días.
Desde la revocación del derecho constitucional al aborto en 2022 por la Corte Suprema de EE. UU., las leyes estatales han adquirido mayor relevancia en casos como este. En Georgia, la legislación impide la desconexión de soporte vital si el feto muestra actividad, lo que obligó a mantener a Smith con vida hasta la semana 34 de embarazo. La familia expresó su preocupación por la incertidumbre sobre la viabilidad y bienestar del bebé tras el parto.
