Cientos de personas se reunieron en Cooper’s Hill, Inglaterra, para participar del tradicional concurso anual del queso rodante. Este evento, con décadas de historia, consiste en lanzar una rueda de queso de aproximadamente 4 kilos por una empinada colina de 180 metros, mientras los competidores se lanzan tras ella en una vertiginosa carrera cuesta abajo.
El singular evento atrae tanto a locales como a turistas de todo el mundo, quienes se enfrentan a caídas y golpes por intentar alcanzar el queso. A pesar de los riesgos, la competencia sigue siendo una de las más populares del Reino Unido por su carácter extremo y festivo, manteniendo viva una de las tradiciones más curiosas del país.