No sabes exactamente qué es, pero ese olor se queda contigo, te marca y no te lo puedes sacar de la cabeza, pero no es algo raro o una coincidencia. Un estudio científico reveló que el olor corporal puede ser más poderoso que la apariencia física a la hora de generar atracción. Así que olvídate de los filtros, los abdominales perfectos o la sonrisa impecable: a veces lo que realmente te conecta con alguien es tu aroma natural.
El olfato está profundamente vinculado a la memoria y las emociones. Por eso, ciertos olores nos transportan a momentos, personas o sensaciones. Y lo más curioso es que nuestro cuerpo también emite señales químicas invisibles para el ojo, pero no para el corazón: las feromonas. Y esas feromonas pueden explicar por qué te atrae alguien sin que puedas ponerle nombre a esa sensación.
¿Te ha pasado alguna vez que te enamoraste del olor de alguien? (Esperamos que haya sido un olor agradable)
