Estos estudios cada vez son más rebuscados, pero uno reciente que encontramos en internet revela que tener un perro o un gato puede generar tanta felicidad y satisfacción con la vida, que es comparable con la felicidad que se experimenta al casarse.
Los investigadores analizaron datos de más de 2.500 familias y utilizaron una escala del 1 al 7, donde descubrieron que tener una mascota incrementa la felicidad en 3 a 4 puntos.
Otra forma para dimensionar este impacto, fue que los investigadores aplicaron un modelo que estima de “cuánto dinero necesitaría una persona para alcanzar el mismo nivel de bienestar”, los resultados, por increíble que parezcan, tener una mascota equivale a un “valor emocional” aproximado de 88.000 dólares anuales.
Otros estudios mencionan que las personas que tienen perros tienden a ser más extrovertidos y emocionalmente estables, mientras que quienes tienen gatos suelen mostrar mayor apertura intelectual.
Pero el mensaje siempre es solo uno: Tener mascota tiene un valor emocional profundo y real.