Una nueva investigación sugiere que optar por dormir en camas separadas podría fortalecer los lazos de pareja. Según un estudio del Consejo del Sueño británico (esto realmente existe), el número de parejas que eligen esta opción ha aumentado del 8 % al 12 % en los últimos cinco años, indicando una tendencia en crecimiento.
Los hallazgos de este estudio informan que los beneficios de dormir en camas separadas son significativos, destacando una mejora en la calidad del sueño y posiblemente un aumento en la actividad sexual con la pareja.
La idea de tener dos camas y quizás incluso dos habitaciones podría estimular el deseo, al romper la rutina y crear un espacio donde la otra persona no esté tan fácilmente disponible. De esta manera, se podría generar una sensación de añoranza que potencialmente avive la llama de la pasión en la relación.